La “reina de los descamizados”

El  26 de julio se cumplen  setenta  años de la partida de María Eva Duarte de Perón, la “reina de los descamizados”, aquella que logrará el mentado Sufragio Femenino, la proclama de los derechos del trabajador  y la construcción de centenares de escuelas centros asistenciales; aquella que quiso ser “inmortal”, una personalidad sobre el cual giran opiniones controvertidas, como lo expresan la cantidad de obras teatrales y literarias que tuvieron y tienen como eje a “Evita”, el ser humano.

Hace setenta años dejaba de existir la mujer, nacía el mito.

Eran las 20.36 pm del día 26 de julio de 1952. Mi abuela cocinaba, mi mamá y su papá conversaban sentados a la mesa, cuando por cadena de radiodifusión  anunció el locutor Furnol que la Jefa Espiritual de la Nación (título otorgado en su último onomástico) había entrado  en la inmortalidad, con las siguientes palabras: “…los restos de la Sra. Eva Perónserán conducidos mañana al Ministerio de Trabajo y Previsión, donde se instalará una capilla ardiente.”

“Evita”, como era llamada por sus “descamizados” (la clase obrera)nació en los Toldos un 7 de mayo de 1919, hija extramatrimonial de un empleado bancario vivió su infancia entre la indigencia y la injusticia social.

A los 15 años viajó a Buenos Aires de la mano del cantor de tangos Agustín Magali, con quien se le adjudicó un romance.

Sus comienzos como artista de radioteatros y películas fueros arduos y se remontan a esa época. EnLa carpa del circo” que fuera prohibida en sus momentos de gloria, compartió cartel con Hugo del Carril y Libertad Lamarque.

En 1944 conoció al General Juan Domingo Perón, con quien se casó un año después. Eva  apoyó  su candidatura a la presidencia logrando gran popularidad. Tras la asunción al mando de 1946 se convirtió en la mano derecha del presidente, transformándose en su puente de unión con los sindicatos, creando la Fundación de ayuda social Eva Perón.

Quien nunca ostentara cargo público en lo empírico tuvo a su cargo los ministerios de salud y de trabajo, si bien la CGT la postula como vice-presidenta, en el cabildo abierto del 22 de agosto de 1951. Ella, lo rechaza, obligada por el ejército  y por su estado de salud a retirar su candidatura.

….Aquel trágico 26 de julio, frio y lluvioso, a las 10.00 am hs entra en una larga  letanía de la que nunca más saldría. El cáncer que padecía ya había hecho sus estragos.

Todo comenzó un 9 de enero de 1950, en el acto inaugural del sindicato de taxistas. Eva, cae desmayada. 4 días después anuncian que deberá ser sometida a una pequeña intervención quirúrgica (una biopsia), lo que no impide que continúe con sus labores habituales en la Secretaría de Trabajo y Previsión Social; contra los consejos de su médico, el Dr. Ivanissevich, quien renuncia por ello.

Son las  17  hs, entra en coma profundo, irreversible. Se acortan las ilusiones para los que la aman.

Atrás quedaron sus sueños y sus logros; algunos de ellos,  como el sufragio femenino, permanecerán en pie generación tras generación.

Un 11 de noviembre de 1951, vota por vez primera, la mujer. (Eva, con la ley 13.010 obtuvo en 1947, la aprobación del gobierno, para el voto femenino.)Ella votó desde la cama dada su gravedad .Perón es re-electo con un 60 % de los comicios. Asume el 4 de junio su segunda presidencia.

A las 20.00  pm, se da el último comunicado, la enferma empeora…

Perón recordando sus momentos terminales manifiesta: “… Aquellos días  de cama fueron  un infierno para Evita. Estaba reducida  a su piel a través de la cual ya se podía ver el blancor de sus huesos. Sus ojos parecían vivos, elocuentes, se posaban sobre todas las cosas, interrogaban todo…”; opinión compartida por el Dr. Ara, su embalsamador. Eva llegó a pesar 33 Kg.

 Son las 20.23 pm  el Dr. Taquini, mira a Perón y le dice: “No hay pulso”.

Evita acababa de eternizarse a través de los tiempos. Sus deseos finales habían sido  claros y concisos, no quería que su ser se consumiera bajo tierra, pidió ser embalsamada; Perón, a tal efecto, convocó a un especialista español, el Dr. Ara.

La reina de los pobres, es  vestida con sus últimas galas para que su pueblo le dé  el adiós definitivo.

El peluquero, a pedido de su hermano, Juan Duarte, le corta un mechón de pelos que le es entregado a su madre. La modista le coloca un rosario bendecido, por el Sumo Pontífice.

A las 22.00 pm comienzan los primeros auxilios para la conservación  del cadáver. Se le administran las primeras fórmulas. El proceso dura hasta las 5 de la mañana.

 Por su parte, la CGT (Confederación General del Trabajo) decreta un duelo de 72 hs. Su cuerpo, es trasladado a la Secretaría del Trabajo y Previsión Social, convertida  en un laboratorio de ejecuciones médicas, donde es velada  durante 15 días hasta el 9 de agosto y permaneciendo allí,  hasta 1955 cuando perón es derrocado, por las fuerzas armadas tras un golpe de estado. Los restos  comienzan un largo peregrinaje, a Italia y luego a Madrid tras el secuestro por parte de los militares, hasta que en 1971 María Estela Martínez de Perón (tercera esposa del general y presidente constitucional) traslada el cuerpo a su tierra natal.

La  historia oficial de su existencia, fue contada por la misma Eva en “la razon de mi vida, en 1951(que años después se le adjudicara su autoría al periodista M. Penella, colaborador de la misma)

Años más tarde su figura fue objeto de múltiples obras: musicales, operas, películas. La más renombrada; “Evita”(1996) de Alan Parker, director británico contemporáneo, que de la mano de Madonna como protagonista componen un personaje polémico sobre la mítica “Evita”. También Esther Goris   la interpretó en el mismo año en la película Eva Perón de Juan Carlos Descanzo

Mas cercana en el tiempo la actriz uruguaya Natalia Oreiro encarna a Evita en Santa Evita, una miniserie de Disney, la multinacional estadounidense. , dirigida por Rodrigo García.

Tras su muerte la leyenda y el mito.

Silvana Salafrica


 

Deja un comentario