Serrat “Me despido de los escenarios pero no de la gente”

El cantante y compositor catalán Joan Manuel Serrat, de 78 años, dijo que su corazón “está tranquilo”, y que solo viene a despedirse “de los escenarios, no de la gente, ni del país, ni de los amigos” En un encuentro que mantuvo con la prensa argentina este mediodía ante un repleto teatro Astros, en la previa de lo que será su gira despedida “El vicio de cantar”.

“No estoy contando los shows que hice y los que me quedan por hacer. Es una actitud absolutamente defensiva. Esta gira está llena de trampas, de emociones, de un sentimiento tremendo de algo que ha sido mi vida y que me ha hecho muy feliz. Por tanto, llevo cada uno de los conciertos como si fuera el único que existe”. terminó diciendo al grupo de afortunados periodistas que lo acompañaron en su conferencia de prensa previa a los shows de despedida que tiene programados el artista.

Poco más de un mes atrás el Concejo Municipal de Rosario aprobó una ordenanza para constituir el Paseo Roberto “Negro” Fontanarrosa, sobre la vereda norte de calle Santa Fe desde Sarmiento por 30 metros hacia el oeste, y con el nombre de Joan Manuel Serrat al Paseo constituido sobre la vereda oeste de calle Sarmiento por 30 metros hacia el norte (como formando un ángulo de 90 grados sobre el bar El Cairo).

A pesar de que a priori se creía que el proyecto iba a materializarse más adelante, con miras a 2023, el show que dará el mítico cantautor en Rosario el próximo 5 de noviembre, en el marco de su gira despedida “El vicio de cantar”, aceleró el proceso.

“Es Paseo Serrat del lado de Sarmiento y del lado de Santa Fe, Roberto Fontanarrosa. Esto sale muy apurado porque Serrat ya está encima de nosotros, no dio mucho tiempo a hacer algo más importante en cuanto a la calle. Él se irá y nosotros seguiremos agregándole cosas”, contó Ricardo Centurión, RRPP del bar El Cairo a Susana Manzelli y Lucas Correa en Una mañana para todos por Cadena 3 Rosario.

Con respecto a porque deja la musica el artista reflexionó en una larga y emotiva respuesta “Ese día que Sabina tuvo la mala fortuna de caerse del escenario y sufrió un accidente grave, aquel día empezó toda una necesidad de saber dónde yo estaba parado. Por el accidente de Joaquín hubo que suspender la gira y justo después de eso apareció la terrible pandemia que nos encerró en las casas, cambió nuestras vidas, nos obligó a un funcionamiento social distinto, todo cambió”.