“Maravilla” busca su mejor nivel para ser campeón
Por Walter Vargas
A escasos días de su cuarta presentación desde que regresó a los rings, el excampeón mundial Sergio Martínez afirma que con “pasitos de hormiga” su evolución es “espectacular”, confía en vencer al británico Macalau McGowen el próximo 27 en el Wizink Center de Madrid y sueña con llegar a finales de año “10 puntos de 10 para afrontar una pelea de campeonato del mundo”.
El pugilista bonaerense, excampeón mundial superwelter y mediano, puso énfasis en el diálogo con Télam en aclarar que hoy se siente “10 puntos” pero que se tratan de “10 puntos sobre los 6 o 7 en el nivel que estoy moviéndome”.
“Por ejemplo, cuando en agosto de 2020 reaparecí con (José Miguel) Fandiño estaba 10 puntos, pero eran los 10 puntos de alguien que había estado inactivo mucho tiempo”, observó Maravilla.
“Para una pelea de campeonato del mundo hay que estar 10 de 10. Si usted ve a los campeones del mundo, cualquiera, Murata (Ryota), Eubank (Chris), Andrade (Demetrius), que boxea fabuloso, además de la contextura física y demás, uno lo toca y le duele la mano. Es una roca”, añadió.
“También yo soy una roca, mi cuerpo evoluciona de forma espectacular, pero hoy no me serviría estar 10 puntos de 10, sencillamente porque la chance del campeonato del mundo se dará, creo, entre septiembre y los primeros meses de 2023”.
En ese sentido, Martínez precisó que siente que su preparación la sido “excelente” para derrotar a McGowan, con récord de 14-2-1 y el mérito de que jamás haber sido noqueado.
En caso de salir airoso con McGowan en el Wizink Center de Madrid, el quilmeño radicado en Madrid prevé volver a presentarse hacia finales de mayo.
Próximo a cumplir 47 años (el 21 de febrero) y dueño de un destacado récord de 54-3-2 y 30 KO, Maravilla viene de obtener tres victorias en su reaparición tras seis años y dos meses de inactividad.
Le ganó antes del límite al español José Miguel Fandiño el 21 de agosto de 2020 en El Malecón de Torrelavega, municipio de Cantabria, y cuatro meses después, el 19 de diciembre y en la misma ciudad, pero en la Bolera Severino Prieto, también noqueó técnicamente al finés Jussi Koivula.
Luego tuvo un parate de nueve meses por la dificultad para organizar festivales por la pandemia de Covid 19 y reapareció el 25 de septiembre del año pasado venciendo por decisión, en una dura pelea, al inglés Brian Rose, en la Plaza de Toros de Valdemoro, localidad ubicada 30 kilómetros al sur de Madrid.
Esperanzado en mantener su racha de triunfos, Martínez destacó a su preparador físico, David Navarro (“es una máquina que me exige y me hace trabajar como a mí me gusta”) y admitió que una oportunidad de disputar el título del mundo “hay que ganársela y en eso estoy. Pasito a pasito, como una hormiga. Hoy estoy 6 o 7 puntos a nivel mundial, no 10, pero calculo que eso llegará en septiembre, por ahí. Apuro no tengo, de momento pienso en McGowan”.
El zurdo nacido en Quilmes el 21 de febrero de 1975 está cuarto en el ranking de la Asociación Mundial de Boxeo (AMB), cuyo monarca es el japonés Ryota Murata y el campeón alternativo el cubano Erislandy Lara.
Murata tiene previsto un combate unificatorio con el ruso Gennady Golovkin, campeón de la FIB, tentativamente para marzo o abril en Japón, y de ganar el boxeador local será la hora de un gran choque con Martínez.