“Y tenés que dejar a la gente que amás, y a ella que te mira y te dice: “yo te espero, siempre te esperaré”
Inició su última gira en Mendoza, esa de la que físicamente no se vuelve. Sin embargo, su legado alcanzó a más de 4 generaciones. Canciones inolvidables que hoy son un himno. Gracias por tanto y hasta luego: Marciano Cantero.
Horacio Eduardo Cantero Hernández, para todos ‘Marciano’, esa historia de elección de apodo me la perdí, igual no es tan importante como lo son cada una de las letras que coreamos en los ’80, ’90, ‘2000 e incluso hoy. Es inevitable que el hit ‘Amigos’ no sea parte de algún cierre de ciclo.
Este jueves, a los 62 años, parte de su cuerpo le dijo hasta acá llegamos y así fue. Hecho que podrá causarnos mucha congoja pero jamás quitarnos lo que fue y es parte de nuestra vida: sus canciones.
Desde chico y después de escuchar a The Beatles, a Marciano lo sedujo el bajo. Esa debilidad lo llevó a aprender, dominar y lograr ritmos únicos con una guitarra que tenía en casa.
No solo nos cantó, sino que compuso temas para otros artistas y también participó con su voz en algún que otro tema de músicos colegas.
1979 fue el año en que formó Los Enanitos Verdes -quizás por eso Marciano- junto con Felipe Staiti y Daniel Piccolo, otros dos mendocinos. Desde ese instante, éxito tras éxito no solo en Argentina sino en Latinoamérica con 16 discos.
Temáticas, compases y ritmos muy variados, Los Enanitos Verdes, parte del rock del país, tocaron la tecla correcta, la que pega en el corazón, la del apego y eso se nota en cada canción, porque son de esas que hacen que el volumen espanten a los vecinos y el consorcio se queje por whastapp. Así lo hicieron en su última gira en 2017 en Lima, Perú; país al que tenía pensado volver.
También coqueteó con ser solista, de hecho lo fue. En esa transición grabó 3 discos. Hasta estuvo viviendo fuera de la Argentina, muchos años.
Esta vez nos toca decirte hasta luego, como si fuera ‘Igual que ayer’, porque estás y estarás aunque no te veamos. Hoy sos ‘esa luz que brilla en la oscuridad’.