La bala de un cazador roza a una madre a la salida de un colegio: “Evitamos por poco el desastre”

Imagen de un cazador (Getty Images)

La caza es una actividad que históricamente ha sido fundamental para la supervivencia de los seres humanos. En la actualidad se sigue practicado por diversas razones además de la alimentación, como el deporte o para el control de animales y la conservación.

Por otra parte, esta práctica siempre conlleva riesgos para aquellos que la practican, principalmente centrados en los accidentes que pueden ocurrir al portar armas de fuego. Los más comunes suelen ser errores o armas en mal estado que acaban en situaciones trágicas. Por ello, es fundamental seguir protocolos de seguridad como llevar el arma descargada cuando no esté en uso o apuntar hacia el suelo.

Una tragedia de este tipo estuvo cerca de ocurrir el pasado martes 14 de octubre en la escuela municipal de Bosson, Bélgica, donde una bala perdida casi alcanza a la madre de un estudiante.

Un gran susto

Al terminar las clases de ese martes 14 de octubre, la madre de un alumno de una escuela municipal de Ferrières (Valonia, sur de Bélgica) oyó un fuerte estruendo a un metro de distancia y al instante vio un agujero de bala alojado en el suelo. “Fue una madre quie notó el impacto de bala cerca de ella”, explicó Marianne Dupont, teniente alcalde de Educación, que acudió al lugar. “Afortunadamente, nadie resultó herido, pero podría haber sido mucho peor”, aseguró.

“La bala dejó un pequeño agujero en la losa de hormigón”, confirmó Christian Verdin, alcalde de Ferrières, que también acudió al lugar de los hechos junto con la policía. “Por poco evitamos el desastre”, admitió el dirigente, tal y como cuenta el medio belga Sudinfo.

Los agentes de Condroz acudieron al lugar de inmediato tras la alerta para determinar el origen exacto del disparo y comprobar las condiciones en las que se organizó la búsqueda.

Una cacería cercana

Se cree que la bala perdida provino de una cacería que estaba teniendo lugar a varios cientos de metros de distancia. “Fue una cacería formal, con las autorizaciones necesarias; nos sorprende que la bala haya recorrido entre 600 y 700 metros”, comenta el alcalde a Sudinfo.

Para resolver este caso e identificar al cazador, se está llevando a cabo una investigación por parte de las autoridades para evitar que se repita una situación similar. Para ello, Verdin también ha prohibido los dos puestos de donde salió la bala, aunque no se sabe cuál es exactamente, y también los puestos situados alrededor de la escuela Bosson para la próxima cacería.

“Respeto mucho a los cazadores. Como agricultor, necesitamos que regulen la caza, pero este tipo de incidentes no deben ocurrir”, sentenciaba el alcalde.

Accidentes frecuentes

Es una situación relativamente habitual la de los accidentes involuntarios en la práctica cinegética. Sin ir más lejos, hace aproximadamente un año, también en Francia, un joven de 30 años tuvo que ser amputado de su pierna tras recibir el disparo de un cazador al confundirlo con un animal. En España las cifras de muertes en esta actividad en 2024 se elevan a once, contando además con 19 heridos, según el recuento de Colectivos contra la Caza, tal y como informa Europa Press.

Estas cifras ponen en el foco las medidas de seguridad de los cazadores, en las que desde diferentes asociaciones se insiste en reforzar la formación y los controles de armas. Los especialistas apelan a una mayor conciencia y prudencia mientras se practica esta actividad para evitar de este modo accidentes que pueden acabar costando vidas.

Con información de UNAR AGENCY